lunes, 17 de junio de 2013

¿Aviones pa' la guerra?

Aquí Opinan
Lunes 17 de Junio de 2013
 |  15
TalCual


Aquí Opinan

¿Aviones pa’ la guerra?



TULIO RAMÍREZ



"Ese José Vicente sí tiene vainas", reflexionaba mi compadre Eustoquio luego de haberse bebido la cuarta cerveza.

Conversaba con el padrino de la menor de mis hijas ya cerca del mediodía de aquel domingo, cuando en su habitual programa matutino, el inefable JVR alertó al país sobre la compra de 18 aviones, óigase bien, 18 aviones de guerra que había comprado la oposición venezolana para invadir el país y derrocar al presidente. Según el fantasma que camina, como lo bautizó mi compadre, esos aviones fueron comprados en Miami y están guardados en Colombia esperando no se qué señal para atacar. Mi compadre siempre tan mamadorcito de gallo, agarró la noticia a joda y le restó la importancia que el propio presidente y los órganos de inteligencia del Estado, le han dado. En chanza decía, "eso fue que escuchó a alguien decir que un vecino de la oposición compró 18 sacos de alimento pa’ la perra y con la sordera que debe tener por los años y la mala intención, entendió que la oposición había comprado 18 aviones pa’ la guerra". Por supuesto, que conociéndolo como lo conozco, no podía esperar otra cosa, ya que mi compadre ha utilizado como mecanismo para mantener la higiene mental, hacer de todo un chiste. Esa estrategia de sobrevivencia en un país altamente polarizado le ha traído dividendos. Además de estar siempre de buen humor y ser perenne invitado a los velorios y fiestas del barrio, se ha ganado la fama de ser la alternativa terapéutica para aquellos que no importando a qué bando político pertenezcan, sufren de depresiones postelectorales o postaudios, dependiendo de cuáles sean las preferencias políticas.

Confieso que siempre le río sus guasas, pero en este caso el asunto no era como para hacer chistes.

Solamente pensar en un ataque con pilotos con mejor puntería que los del 27N de 1992, aterroriza. Imaginar que se lancen de esos aviones cientos de paracaidistas y caigan en la Plaza Diego Ibarra tomando por asalto cuanto punto rojo del PSUV se consigan, me pone la piel de gallina. Dígame si escogen un día jueves cuando hay mercado en Quinta Crespo, ¿dejará la gente de hacer cola para conseguir un rollo de papel toilete al ver a los marines armados hasta los dientes?, no lo sé, pero estos pueden pensar que al no moverse la cola sea una estrategia de resistencia de la población civil y pueden atacarla. Ojalá avisen antes de la invasión para tomar las previsiones, quedarse en casa y poner las frías en la nevera la noche anterior.

Les juro que todo eso pasó por mi mente, pero luego me pregunté: ¿con qué trasero se posa la cucaracha? La Gente del Petróleo no puede comprar esos aviones, ¿con qué?, si ni siquiera las prestaciones les han pagado, ¿quién los piloteará?, Carlos Ortega maneja un autobús en Lima, Horacio Medina vende casas en Florida, el ingeniero Peralta hace transporte escolar en Montreal e Yvanka se redondea la papa dictando cursitos on line.

Creo que mi compadre tenía razón, JVR como que escuchó mal, eran 18 sacos de comida pa’ la perra y no 18 aviones pa’ la guerra.

lunes, 3 de junio de 2013

Carta a Kico


Aquí Opinan
Lunes 03 de Junio de 2013
 |  14
TalCual


Aquí Opinan

Carta a Kico



TULIO RAMÍREZ



Eso de estarle escribiendo cartas a hombres no es mi fuerte. Sin embargo, dadas las circunstancias, me veo obligado a ello. Confieso que la última vez que le escribí a un colega de género, fue al niño Jesús, y debido a que no me trajo lo que pedía y nunca me respondió ofreciéndome una disculpa, pues decidí circunscribirme a la redacción de misivas solo para dos tipos de destinatarios: para mujeres que lo merezcan y para pedir al gobierno de turno cualquier tipo de exoneración. En este caso, repito, haré una excepción.

Estimado Kico, aunque no te conozco personalmente es como si hubiésemos crecido juntos. Yo estudiaba sociología y tú comunicación social, ambos hacíamos vida política en nuestra querida UCV. Tú estabas con el MAS de Freddy Valera, Pavel Rondón, Tulio Hernández y yo andaba con la Liga Socialista de Cucho Moreno, Marisel Laprea, Juan José Romero y compañía. Somos de la misma generación de universitarios de finales de los 70 y aunque en aceras izquierdosas diferentes, marchábamos juntos por lograr un presupuesto justo para la universidad, porque nos aumentaran la mísera beca de 600 bolos de los de antes, es decir, de los buenos, y porque en Venezuela se acabara para siempre la corrupción y la pobreza. Cuántas veces no nos cruzaríamos por esos pasillos, o compartiendo filas en el Aula Magna para escuchar a Soledad, Alí y a la Nueva Trova, cuando nos visitaba.

Ha pasado mucho tiempo. Tú te dedicaste a los medios de comunicación y yo, con mucho orgullo, a pelar bolas como profesor ucevista. Por supuesto, como asiduo lector de periódicos, siempre seguí tu columna dondequiera que la publicaras y me convertí en fiel lector de El Mundo durante tu tránsito por la Dirección de ese vespertino. Luego pasaste a Globovisión, allí se te destapó la vena de humorista y de ameno comentarista de la política nacional. Incursionaste en la radio muy exitosamente, primero con Vladimir y luego con Carla Angola, bueno, no preciso exactamente en cuál orden.

Recuerdo cuando comenzó el experimento con Buenas Noches, era una apuesta arriesgada por la hora, en Venezuela no se había impuesto la moda de trasladar el prime time de las 9 a las 10 de la noche, pero te atreviste. Vimos un programa que al comienzo pretendió ser muy informal, con una dosis exagerada de comicidad e intencionalmente desordenado. Sin embargo al poco tiempo logró la estructura adecuada hasta convertirse en lo que hasta ayer fue: uno de los programas de opinión más vistos de la televisión venezolana.

Creo que conociéndote como en verdad no te conozco, tomaste la decisión previsible de acuerdo a tu trayectoria y formación. Esa conversación con los dueños no podía durar más de 5 minutos. Eres abierto con el que quiera dialogar, pero incólume frente al que quiera imponerse por la fuerza de las armas o del dinero, así somos los ucevistas, Kico. Hermano, seguro que te irá bien, tienes el talento y eres emprendedor, eres un venezolano de los buenos. ¡Mucho éxito! PD: Para no variar, saludos a Carla, Roland y a Pedro Luis.